Situación, conflicto y diferencia pueden ser los tres momentos de una crisis internacional; pero no se dan siempre de forma necesaria, ya que los mecanismos del arreglo pacífico pueden funcionar en cualquier de los tres momentos para prever que la situación continúe, evitando el nacimiento del conflicto o su prolongación, lo que daría paso en esta última hipótesis que nos encontramos ante una verdadera diferencia.